Hermann Tertsch se resiste al chantaje sindical

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Buenas noches a todos los que aun estén ahí ante sus televisores. Se lo agradecemos mucho. Sabemos del esfuerzo que supone para muchos de nuestros seguidores aguantar despiertos hasta el horario habitual de nuestro programa. Ójala podamos adelantarlo en un futuro. Y convertirnos en pioneros de una europeización del horario televisivo español.

Pero que hoy acudamos a nuestra cita con Ustedes casi una hora más tarde tiene otros motivos. Hoy ni siquiera vamos a echar la culpa a los sindicatos que son los ejecutores de la sistemático obstrucción de la programación de Telemadrid. Y que el día después de las elecciones quieren volver a dinamitarla.

Los sindicatos españoles, fieles a quien les paga lo que nunca obtendrían de su paupérrima afiliación, no muestran mayor preocupación por el hundimiento de nuestro tejido social, laboral e industrial por toda la geografía española. Su único objetivo hoy parece ser obedecer la consigna de acallar Telemadrid.

La han recibido de aquellos que nos consideran una voz y una opinión intolerable y perniciosa. Por discrepante. De una forma u otra, mediante pago o intimidación, nuestro Gobierno ha logrado que no existan ya prácticamente medios audiovisuales que lo critiquen con la contundencia que sus fracasos, su irresponsabilidad y sus mentiras merecen. Lo hace aquí Telemadrid y algunos otros pocos.

Y Diario de la Noche está orgulloso de estar en la vanguardia de esa pequeña plataforma de resistencia tanto a la falsedad como a la indolencia. Estamos pagando un precio alto por hacer frente a esta huelga política. Pero muchos estamos dispuestos a pagarlo aun mayor. Porque creemos que la lucha por la libertad de expresión es el fundamento de nuestra dignidad. Y porque no queremos vivir en una sociedad donde se trate al discrepante como se nos trata a nosotros.

No tengo ni idea hasta donde son capaces de llegar aquellos que nos quieren negar la libertad y la dignidad. Por la historia sabemos que el odio al discrepante ha llevado muy, muy lejos. Pero también sabemos que una sociedad que quiere ser libre es capaz de poner coto a los abusos de una minoría.

Pero dejemos este triste capítulo para recordarles una tragedia peor porque se ha cobrado 228 vidas humanas. Se han localizado ya algunos restos del avión de Air France que cayó al Atlántico hace dos noches. Nada se sabe sobre las causas de la catástrofe aunque al final se reducen a dos: O ha sido un accidente o ha sido un atentado. Para los muertos por desgracia esto ya no importa. Para los vivos es de vital importancia que haya certeza de lo uno u lo otro.