Responder ciertas cuestiones
Desde el post Educación diferenciada, libertad para elegir, me preguntan un par de cosas que paso a contestar:
Pregunta: Si usted tuviera el poder político suficiente, sólo por un momento, como para decidir que las parejas homosexuales, tengan esa opción de eligir casarse o no con sus parejas...¿LO PERMITIRÍA?
Respuesta: No, permitiría sus uniones, pero en ningún caso lo llamaría matrimonio. Sobre la cuestión de los matrimonios estériles... en fin, cae pro su propio peso. Voy a ver si me explico: la ley regula situaciones generales (no particulares) y la 'generalidad' es que un matrimonio (hombre y mujer) está por su propia naturaleza abierto a la vida, y es completo por tanto. Luego tendrán o no hijos, pero esa es la particularidad de cada caso. La ley debe proteger la unión entre el hombre y la mujer porque es provechosa para la sociedad 'per se'. Eso no quiere decir que se niegue a las parejas homosexuales derechos, pero la figura legal a emplear no es la de matrimonio. Simplemente digo eso. Por cierto, sí afecta a los que hemos contraído matrimonio, ya que al tratar igual lo desigual, se hace injusticia. Son ciudadanos como todos, y pueden contraer matrimonio, como todos, pero el matrimonio es la unión entre hombre y mujer. Es que en ese caso, yo puedo decir que estoy discriminado frente a Emilio Botín ya que no tengo la misma pasta que él, o que los diputados tengan ciertas prerrogativas en cuanto a seguridad jurídica. Somos iguales, pero diferentes. Y eso es bueno y no discriminatorio. Espero haber aclarado tu pregunta.
Pregunta: ¿llevarías a tus hijos a una escuela de enseñanza diferenciada pública?
Respuesta: No creo, pero dependerá de muchas cosas, no sólo del hecho de ser o no diferenciada: calidad de la enseñanza, ideario del centro (ahí es donde estaría la mayor complejidad), calidad del profesorado, etc. Mi defensa de la educación diferenciada, no viene tanto de un problema padagógico (que me gusta e interesa por muchas razones), sino de un problema de libertad (que sí que me ocupa mucho). Las diferentes ofertas pedagógicas deben poder competir sin mayores problemas y que cada padre elija la que quiere sin limitación alguna (y el dinero puede ser una, y para poder ejercer esa libertad sin trabas, o bien el Estado me deja el dinero en mi bolsillo para costear esa educación, o bien la paga). Lo que me sorprende desde hace tiempo en la 'izquierda progre' es el miedo a competir -si tan buena es la coeducación, tan buena es la escuela pública, tan maravillosa es la escuela laicista, ¿por qué ese miedo a que los padres elijan? Elegirán esa tan buena- y el miedo a que los padres elijan lo que ellos no han previsto. Sinceramente, lo único que pido es que se respete la libertad de cada cual para elegir lo que quiera.
Sobre la cuestión de los dineros públicos (que será la próxima cosa), sólo pido que se empleen en aquello que los ciudadanos demandan, no en lo que los políticos impongan. Quiero decir que a mí no me gusta financiar abortos, y los estoy financiando con mis impuestos y no dejo de pagarlos. Del mismo modo, las escuelas diferenciadas tienen una demanda enorme (hay padres que no pueden llevar a sus hijos porque no hay plazas suficientes) y lo razonable es emplear el dinero de esos contribuyentes en favorecer su derecho a la educación. A lo mejor no le gusta al político de turno, o a algunos contribuyentes, pero allí donde hay una escuela diferenciada, la demanda es enorme. Sólo en Madrid, colegios como Tajamar, Senara, Monte Tabor, Mater Salvatoris (por citar sólo los concertados) tienen cada año una lista de admisiones enorme, mientras los colegios de la zona (en su mayoría públicos) dejan plazas sin ocupar. ¿Están todos estos padres equivocados? ¿Debemos imponerles a todos ellos la obligatoriedad de llevar a sus hijos a los colegios que diga el Estado simplemente porque ellos no poseen el dinero para pagarse la escuela privada? Poco democrático suena eso.
Comentarios
Por cierto muy bueno tu blog. Te aconsejo entrar en http://www.speropress.com y ya me dices.
La ley natural, o de la selva como dicen algunos de mis amigos, hace que los seres humanos, como animales que somos, tengamos una relación estable, o no, con un congenere del sexo opuesto principalmente con función reproductora para la perpetuación de la especie.
A todo esto lo hemos ido posteriormente añadiendo la parafernalia que le da la sociedad.
Hemos creado una sociedad que tiene en cuenta el valor de las posesiones y hemos decidido que estas posesiones se hereden.
Nos hemos socializado e inventado el derecho de herencia.
De esta forma un señor o señora que ha trabajado y obtenido unas posesiones le hemos dado el derecho a que su pareja pueda heredar ese fruto de su trabajo en caso de que falleciese.
Así hemos ido ampliando dichos derechos. Pero la concepción del matrimonio es previo a todos esos derechos sociales añadidos.
Ahora se presenta la solicitud por parte del colectivo de homosexuales, para que ellos tengan el mismo derecho de herencia y pretenden que lo llamemos matrimonio.
Estoy a favor de que se les den unos derechos sociales, pero por favor que no denigren el nombre de matrimonio.
Otro asunto para que sigas: ¿cuantas de "esas" se habrán roto en seis meses, en un año, en dos...? ahí se puede dar bien, seguro y duro.
Frid
También os llamaría muchísimo la atención la cantidad de niños con una media de 2-3 años, con padres casados como "Dios Manda" que están divorciados.
Os pensais que un proceso de adopción es tan fácil como ir a Ikea y decir me llevo este mueble. Pues no es así, cualquier pareja de esos, esas o de aquellos, pasan un largo y duro proceso burocrático, que en ocasiones se alarga años y años. Van de despacho en despacho, pasan pruebas psicológicas, tienen muchas entrevistas con diferentes asistentes sociales, es decir, que en nuestro pais no se entrega un menor a cualquiera. En este complicado camino, porque es complicado, creedme, se descartan a "matrimonios como Dios manda" y a matrimonios homosexuales que no cumplen con los requisitos.
Con todo esto quiero decir que seamos objetivos con todo lo que exponemos, porque es muy fácil decir que todos los homosexuales son infieles sin nombrar a la otra parte: los heterosexuales.
Sobre la adopción, simplemente un detalle: lo que se busca con ella es dar al niño aquello que por desgracia no ha tenido (un padre y una madre, una familia). No es un derecho a tener un niño, como si fuera un jarrón o un perrito. El derecho es siempre del niño, no de los padres a él. Y aquí podemos empezar una discusión sobre qué es mejor para un niño.
Hay muchos niños que hoy viven sin su padre (o sin su madre) debido a la cantidad de divorcios, padres ausentes, familias rotas, trabajos que obligan a que a los niños los crían, en el mejor de los casos las abuelas, o la chacha rumana con la que no se comunica porque ni siquiera habla español. Que esta sea una realidad, no quiere decir que sea lo óptimo ni a lo que debamos tender... y esa es mi lucha, mejorar o como dice el título de este blog 'cambiemos el mundo'
Gracias por tu comentario (tono correcto, exposición...).