El 'dueño' del suelo público y su gestor

Ayer asistí al debate/presentación de los candidatos a Alcalde de mi municipio (Rivas Vaciamadrid). Aunque ya dedicaré un post a comentar el acto en sí, hay una cuestión que no quiero dejar pasar ante un comentario que le hice al candidato y actual Alcalde por Izquierda Unida, don José Masa. Argumenta el señor Masa que su obligación 'constitucional' es garantizar una plaza pública a cada niño de Rivas y después será el padre (también es un derecho constitucional que le recordé) el que decida si le lleva a ese colegio o a otro. Argumenta que si un colegio 'privado' que luego reciba concierto de la administración quiere instalarse en el municipio, deberá pagar el suelo a precio de mercado.

Todo este argumento responde al hecho de que la izquierda considera que la educación para alguien que monta un colegio es un 'negocio' y 'no vamos a regalar el suelo público a nadie para que haga negocios'. Vayamos por partes. Un colegio no es un negocio y normalemente son iniciativas de tipo social. No se suele ganar mucho dinero con ello. De hecho la mayoría de estos colegios 'sobrevivien' gracias a donaciones que permiten sufragar los servicios que ofrecen y que los colegios públicos tienen y que el escasísimo concierto educativo no cubre (personal administrativo y limpieza, actividades extraescolares, logopedia, mantenimiento del material, construcción de instalaciones). Teniendo en cuenta que no pueden cobrar a los padres sino pedir su ayuda, el panorama es como para hacerse millonario. Pero en cualquier caso, ganar dinero sólo parece inmoral en esa extraña concepción del universo que se llama 'marxismo' y según la cuál todo es público y curiosamente son los miembros dirigentes los que terminan haciéndose ricos en esa inmensa burocracia.

Pero es que además, don José Masa (al que agradezco el tono de su respuesta y el emplazamiento público que hizo para hablar de políticas sobre familia y para las numerosas en particular tras la elecciones y si sigue siendo alcalde) se compromete a hacer polígonos industriales públicos para que se instalen empresas en el municipio. Y eso porque aportan empleos al municipio, servicios... ¡vaya, lo mismo que un colegio! ¿Por qué hay suelo para empresas y no para 'empresas educativas'? ¿No tendrá que ver más con unos determinantes ideológicos de control de conciencias?

Comentarios

Entradas populares de este blog

El primer ministro australiano y la inmigración

Bruselas, última parada?

Discutiendo sobre sistemas políticos