Sigue la persecución del lobby gay

La agenda del lobby gay (a la que la izquierda se ha sumado de forma entusiástica no porque le importen los homosexuales -Castro, Chavez y demás patulea progre lo demuestran- sino por jorobar a la religión) sigue su curso y en ella se encuentra el 'asesinar' civilmente al menos a todos aquellos que se oponen a sus delirios. Y así está ocurriendo con la juez de Denia (Alicante) a la que se le abre expediente por parte del Tribunal Superior de Valencia simplemente por haber recurrido la ley que aprobaba los matrimonios entre presonas del mismo sexo. Un fiscal que 'nunca hasta ahora se haya interesado por el trámite del Registro Civil y lo haga sólo respecto de los expedientes de matrimonios homosexuales, como si sólo ellos y no los demás tuvieran derechos fundamentales' comenzó atacándola para después denunciarla por menosprecio al Ministerio Fiscal valiéndose de su condición de juez. Aunque el CGPJ no vio nada punible en ello, el TSJV sigue la agenda de un colectivo que sólo pretende acogotar e imponer una visión sectaria de la sociedad, y todos aquellos que no compartimos la ideología de género somos tachados de 'homófobos', nuevo pecado de lesa humanidad.

Pues bien, somos muchos los que decimos que la unión entre personas del mismo sexo no puede tener, por su propia naturaleza, el mismo tratamiento jurídico que el matrimonio, lo diga un Parlamento o quien sea. Y no puede porque no es lo mismo una unión fecunda para la sociedad en los hijos que una unión estéril de suyo como lo es la unión entre homosexuales. La humanidad no se divide entre homosexuales y heterosexuales, sino entre hombres y mujeres. Lo otro es un invento de unos cuantos locos.