Herrero secuestrado.. y el PSOE aplaude

La reacción del PSOE y demás terminales mediáticas tras el secuestro y deportación de Luis Herrero en Venezuela por hacer uso (oh, gran delito!!) de la libertad de expresión ha sido muy curiosa. Uno puede disentir de, pongamos por caso, Leire Pajín o el mismo Zerolo. Hasta ahí todo normal. Pero imaginemos que, no creo que se atreviera, Pajín o Zerolo van a Irán invitados por un grupo opositor (si es que queda alguno) al régimen de los ayatolás para ser vigilantes y garantes de forma internacional (parece que tocar a un ciudadano de un país occidental, que además sea diputado o algo así, es algo más complicado que hacerlo con uno del país) y que al llegar a Teheran critican el estado en el que se encuentra la mujer en Irán o que el hecho de que se ahorque a los homosexuales constituye una muestra de intolerancia que no es admisible. Supongamos que el régimen de Ahmenayad decide detener a nuestros conspicuos socialistas y, sin dar más explicaciones, ponerles rumbo a Turquía para que sean repatriados a España. Vayamos más lejos y pensemos que en lugar de Irán se tratara de la Italia de Berlusconi y que ante una invitación de El Olivo, un socialista llama 'mafioso' a Berlusconi por sus diversos problemillas con la justicia. O bien le llaman ultracatólico por su negativa a ejecutar a Eluana. Y que Berlusconi, tan poco demócrata él, va y expulsa a la Pajín o a Zerolo vía Mallorca, aunque sin saber si va a ir a parar a Sicilia...

Supongamos además, que saliera uno del PP afirmando que 'hombre, ¿cómo se les ocurre defender la homosexualidad en Irán? si es que hay que ser prudente y respetar las reglas del país que te acoge'. Y si vamos más allá, imaginamos que gobierna el Partido Popular y que la respuesta del embajador de España es 'que juega la Lazio contra la Roma y ahora no puedo ocuparme de un diputado español lenguaraz'. Imaginemos además que, si se tratara del segundo caso, el Gobierno dijera que 'un incidente menor como este no empaña las estupendas relaciones entre los gobiernos'. Imaginemos la escandalera nacional. Imaginemos a los titiriteros delante de las sedes del PP, la quema de banderas de Italia...

Pero jamás se atreverá un socialista a criticar a un régimen musulmán. Ellos van allí a comer bien y a beber mejor. Se disfrazan con el velo ellas durante un día, como si fuera llevar uno de los complementos de Dolce & Gabanna que acostumbran nuestros progres y no el símbolo de la sumisión de la mujer al hombre. Pero ellos sí siguen en los países musulmanes sus propias indicaciones: nada de críticas, nada de defender los derechos humanos, nada de apoyar la causa de la libertad.

Pero Luis Herrero no ha actuado así. Luis Herrero ha defendido lo que defienden los socialistas compañeros de internacional de Zeta. Luis Herrero ha defendido la libertad de expresión y la democracia ante un tipo que es un dictador, golpista condenado y que ha sumido además a su país en la pobreza. Hugo Chávez es hoy el mayor peligro para Iberoamérica, peligro que ha sufragado con el dinero que los americanos (esos a los que tanto insulta) y los europeos le damos. Después de perder un referendum para perpetuarse en el poder, este siniestro personaje no ha cejado hasta convocar otro y ganarlo. Y si hubiera perdido, daría igual, ya que volvería a convocar hasta que ganara. No importa para Chavez la democracia. Lo que han votado es simplemente la negación de la democracia: ¿Puede un cargo electo presentarse infinitas veces? Pues en Venezuela Chavez va a seguir infinitamente. Pero es que, además, tenemos el hecho del método empleado con la oposición: enviar a la policía a detenerlos, los jueces abren causas falsas contra ellos en connivencia con el poder político, se asaltan sus sedes, se les señala como fascistas y amigos del imperialismo (sic), se copan los medios de comunicación no dejando que la oposición pueda manifestarse... ¡¡Dios mío, cómo me suena esto!! ¿Pero a qué?

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