El problema no son los 110

El petróleo no hace más que subir, los precios de los combustibles se disparan, llenar el depósito es casi un lujo... Las recientes crisis en los países productores de petróleo están provocando una situación casi insostenible, ya que no somos capaces de prever el curso de los acontecimientos y eso es fatal para la economía. En una situación así, los países con una mayor dependencia energética sufrirán más las consecuencias en términos de coste y de deuda. España está en ese caso: nuestro país no produce energía y la que produce lo hace mediante combustibles fósiles que debe importar. Es complicado competir en esas condiciones.

Dicho lo anterior, parece que es lógico el buscar fórmulas que permitan ese ahorro energético. España es de los países donde el coste energético por unidad de producto producido es más alta. Independientemente de la coyuntura del petróleo, hay que corregir ese desequilibrio. Por eso, cualquier decisión tendente a ello debe ser aplaudida. Favorecer el uso de energías más baratas y que puedan producirse en el país, ahorrar allí donde sea posible (horarios, transporte público, etc.), concienciar a los ciudadanos de la necesidad de hacer un uso responsable de la energía (tal y como se hizo con el agua)... todo es bienvenido.

El problema del gobierno socialista es que las únicas soluciones que encuentra a los diferentes problemas se reducen a dos: prohibir y subir impuestos. Uno puede aceptar el buscar el ahorro energético, pero es que siempre es a costa de nuestra libertad. Comenzaron 'no pudiendo conducir por mí', y ahora ya conducen por mí directamente. Siempre es por mi bien: no comas hamburguesas que engordan, no bebas vino que es muy malo, no pondrás crucifijos en las escuelas para no ofender a nadie, no fumes que da cáncer... y ahora vamos a ahorrar energía por decreto.Ya que se han puesto en plan progresista, les doy más ideas: que prohíban los coches por completo. Todo el mundo en bicicleta o mejor en burro. En este último caso, podemos además hacer más bien, ya que el burro ibérico se encuentra en extinción por lo que el hecho de obligarnos a usarlo seguramente hará que la especie se revitalice, contribuyendo a una economía sostenible, pero es que las heces de este animal pueden ser empleadas como abono e incluso como combustible. Pasaríamos a ser independientes energéticamente. La foto que ilustra este post será el futuro de España: es lo que tiene el socialismo, y si no que se lo digan a los cubanos.

La única pega es que a Zapatero le fastidiaría que el que se haría rico es Bono, que para eso ya tiene la hípica montada, pero ¿qué es eso en aras de salvar al país y a sus ciudadanos de esa cosa tan engorrosa que es el progreso? ¡Vuelta a los carromatos ya!