Las enseñanzas del caso de Mariluz
El caso de la niña de Huelva asesinada por un pederasta que debía estar en prisión ha abiertoun debate (el enésimo) sobre los delincuentes sexuales, el cumplimiento íntegro de las penas, la cadena perpétua y los errores de la administración de Justicia (no confundir con la 'Justicia', que es otra cosa mucho más loable). Los datos que vamos sabiendo son espeluznantes: el tipo ya había abusado de su propia hija, tenía condenas pendientes, el juez no ordenó su ingreso pensando que estaba en prisión, la policía no sabía que andaba por Huelva, no había comunicación entre juzgados para saber que aunque la pena era pequeña, tenía juicios pendientes y por tanto hablábamos de un reincidente. La secretaria judicial estuvo de baja más de un mes ¡¡¡por un esguince!!!, luego cogió sus vacaciones y luego cambió de destino (esto en una empresa privada ni se les ocurre). Independientemente de que se depuren todas las responsabilidades, se corrijan los errores (si empiezan les lleva al menos lo...