Crisis de gobierno: sectarismo y agitación
El presidente Rodríguez ha decidido blindarse políticamente con un Gobierno claramente pretoriano. Un Gobierno que huye de aspectos técnicos y de eficacia para dedicarse fundamentalmente a la propaganda y a proteger al presidente de la crisis y el paro. Analicemos y veremos:
Elena Salgado es quizá una de las personas más sectarias que tenía el Gobierno socialista. No es alguien, aunque su formación es económica, que sea experta en economía. No se busca, por tanto, un perfil técnico para solucionar la crisis, para que emprenda reformas o para que controle el gasto. No. Se está buscando alguien dispuesto a dar explicaciones a la opinión pública, convencida de su labor y fiel, ante todo fiel al presidente. Ya no se buscan pesos pesados del partido, sino gente muy fiel al señor Rodríguez. Elena Salgado es un ejemplo claro de esto. La crisis nos la arreglarán desde fuera con el dinero que iremos poniendo. Aquí no se va a hacer nada para arreglar la situación económica. Porque ¿qué quedó del Ministerio de Ciencia e Innovación? ¿Qué del I+D+i? Nada, y nada podemos esperar de Elena Salgado, salvo que controle el gasto y gasto que hará el 'estudiante' Blanco. Y la única esperanza que podemos tener en ella es que nos imponga (la crisis obliga) el llevar su vida sana y comer menos (no hay mal que por bien no venga): ya intento prohibirnos fumar, comer hamburguesas y beber vino, o sea, que esperénse lo peor y se quedarán cortos. Es sectaria y enemiga de la libertad a partes iguales. Sello de garantía socialista.
¿Y el resto? Pues ahí están el 'escudero' fiel de ZP que es José Blanco, que varias veces se había rumoreado como ministrable y siempre se había quedado a las puertas del Consejo. El problema es la preparación que tiene José Blanco: un excelente ganador de elecciones (hasta Galicia), pero cuya preparación, no sólo académica aunque se nos enfaden en El País y La Vanguardia, es más que cuestionable. Hablamos del ministerio más importante en lo referido al gasto, y con el que se puede hacer más demagogia y más cálculo electoral. Invertir ahí donde el PSOE lo necesita, castigar a las regiones que no les votan. Blanco ha demostrado ser un sectario aún mayor que Salgado. Es un director de campaña (para todas las que habrá) con mucho dinero para gastar.
Manuel Chaves es una 'joven promesa' que viene de triunfar en Andalucía. ¡¡Por Dios!! Andalucía ha sido la región de Europa que más subvenciones ha recibido, y sigue siendo una de la más pobres de Europa. La tasa de paro duplica la española (¡¡qué decir de la europea!!), los niveles de fracaso escolar son de escándalo, la modernidad brilla por su ausencia. Entonces, ¿para qué lo elige ZP? Pues hay dos teorías: una es que era el único de los famosos 'tres tenores' socialistas (Bono-Ibarra-Chaves) que quedaba en activo, las encuestas ya situaban al PP a un punto del PSOE (lo que puede suponer un descalabro en una hipotéticas generales siendo Andalucía y Cataluña el 'vívero' de votos) y en el mismo PSOE andaluz se pedía su relevo. La solución sería la ya famosa 'patada hacia arriba'. La otra es que una de las cuestiones espinosas (¡cuál no!) que tendrá que lidiar ZP es decirle a los diferentes presidentes autonómicos que ya no hay margen presupuestario para todas las promesas que hizo en la famosa 'ronda del sofá' del invierno y que de lo dicho, nada. Ahí estará la crisis que se agudizará con el partido hermanastro en Cataluña, el PSC, y nadie mejor para capear el temporal que el presidente del PSOE y 'peso fuerte' en el aparato con Zarrías (¡de la que se libran los andaluces!) de escudero. No hay dinero para repartir y nadie como Chaves para quemarse en esa batalla con los catalanes. Ahora, que una remodelación y renovación sea poner a un tipo que lleva 19 años de presidente andaluz, más cuatro de ministro con González, es cuanto menos irónico.
Trinidad Jiménez es una de las 'chicas del presidente', fiel a él desde hace muchos años. Pero ante todo es una gran activista política y, al lado de Aído, pueden ser auténticamente temibles en su actividad sectaria proaborto. Una de ministra de igualdad (a la que le han quitado política social se queda sólo de 'ministra de aborto') y la otra de sanidad, que es la otra pata del banco. Un ministerio que casi no tiene competencias por estar todo transferido, pero que propaganda puede hacer un rato, y para ello nadie mejor que una activista de pro.
En este nombramiento, pese a no coincidir ideológicamente con él, creo que el presidente elige, al menos, a alguien que sabe de la materia de la que deberá de tratar. Se trata de Angel Gabilondo, ex-rector de la Universidad Autónoma de Madrid y hermano del periodista Iñaki Gabilondo y uno de los promotores del 'sindicato de la zeja'. Ya digo que este es muy, pero que muy sectario (al estilo de su hermano), pero al menos es competente en la materia. No sé si es para alegrarse o para asustarse...
La última, pero no por eso más emocionante es Angeles González Sinde, presidenta hasta ayer mismo de la Academia del Cine. Es quizá el nombramiento más sorprendente y a la vez más definitorio. Sutituir a alguien como César Antonio Molina que es un hombre culto, moderado por una persona que si sabe de algo, es de cine, pero cultura es más que cine. ¿Qué sabe González Sinde de museos, teatro, el mundo editorial, las ferias de arte, arquitectura...? Nada, es una pura nulidad, pero eso sí, de nuevo ahora que habrá que recortar, compra Zapatero el silencio de los 'titiriteros'. Es el pago que hace el presidente a aquellos que le auparon a la presidencia hace un año. Ha sido recibida ya con mucha precaución por parte de los internautas que la han bautizado como González SINDEscargas, ya que es una defensora feroz del canón digital. O sea, que si hubiera nombrado a Teddy hubiera estado más aseado, aunque González Sinde cumple la cuota, que siempre es muy estético.
Y la guinda es el ministerio del Deporte que no existe pese a las promesas del presidente, pero que asume él. ¿Y por qué? Pues porque trata de minimizar un posile éxito de Ruiz Gallardón en la candidatura olímpica que haga que se perfile, él y su jefe Rajoy, como dupla presidenciable. De esta manera podrá vender que es él (que no ha hecho sino poner pegas en materia de infraestructuras a Madrid) el que logra la candiatura. Eso y monopolizar, en un momento de crisis, las fotos con Nadal, Contador, y demás deportistas. O sea, pasar del 'sindicato de titiriteros' al de 'deportistas de la zeja'. Un asquito, oiga.
Resumimos. ¿Qué tenemos? Un gobierno pensado para las diversas citas electorales, que buscará la propaganda y el cubrir al 'líder supremo' de cualquier eventualidad dentro y fuera del partido. Se rodea de fieles de la secta progre y de activistas de la agitación. Eso es todo...
Elena Salgado es quizá una de las personas más sectarias que tenía el Gobierno socialista. No es alguien, aunque su formación es económica, que sea experta en economía. No se busca, por tanto, un perfil técnico para solucionar la crisis, para que emprenda reformas o para que controle el gasto. No. Se está buscando alguien dispuesto a dar explicaciones a la opinión pública, convencida de su labor y fiel, ante todo fiel al presidente. Ya no se buscan pesos pesados del partido, sino gente muy fiel al señor Rodríguez. Elena Salgado es un ejemplo claro de esto. La crisis nos la arreglarán desde fuera con el dinero que iremos poniendo. Aquí no se va a hacer nada para arreglar la situación económica. Porque ¿qué quedó del Ministerio de Ciencia e Innovación? ¿Qué del I+D+i? Nada, y nada podemos esperar de Elena Salgado, salvo que controle el gasto y gasto que hará el 'estudiante' Blanco. Y la única esperanza que podemos tener en ella es que nos imponga (la crisis obliga) el llevar su vida sana y comer menos (no hay mal que por bien no venga): ya intento prohibirnos fumar, comer hamburguesas y beber vino, o sea, que esperénse lo peor y se quedarán cortos. Es sectaria y enemiga de la libertad a partes iguales. Sello de garantía socialista.
¿Y el resto? Pues ahí están el 'escudero' fiel de ZP que es José Blanco, que varias veces se había rumoreado como ministrable y siempre se había quedado a las puertas del Consejo. El problema es la preparación que tiene José Blanco: un excelente ganador de elecciones (hasta Galicia), pero cuya preparación, no sólo académica aunque se nos enfaden en El País y La Vanguardia, es más que cuestionable. Hablamos del ministerio más importante en lo referido al gasto, y con el que se puede hacer más demagogia y más cálculo electoral. Invertir ahí donde el PSOE lo necesita, castigar a las regiones que no les votan. Blanco ha demostrado ser un sectario aún mayor que Salgado. Es un director de campaña (para todas las que habrá) con mucho dinero para gastar.
Manuel Chaves es una 'joven promesa' que viene de triunfar en Andalucía. ¡¡Por Dios!! Andalucía ha sido la región de Europa que más subvenciones ha recibido, y sigue siendo una de la más pobres de Europa. La tasa de paro duplica la española (¡¡qué decir de la europea!!), los niveles de fracaso escolar son de escándalo, la modernidad brilla por su ausencia. Entonces, ¿para qué lo elige ZP? Pues hay dos teorías: una es que era el único de los famosos 'tres tenores' socialistas (Bono-Ibarra-Chaves) que quedaba en activo, las encuestas ya situaban al PP a un punto del PSOE (lo que puede suponer un descalabro en una hipotéticas generales siendo Andalucía y Cataluña el 'vívero' de votos) y en el mismo PSOE andaluz se pedía su relevo. La solución sería la ya famosa 'patada hacia arriba'. La otra es que una de las cuestiones espinosas (¡cuál no!) que tendrá que lidiar ZP es decirle a los diferentes presidentes autonómicos que ya no hay margen presupuestario para todas las promesas que hizo en la famosa 'ronda del sofá' del invierno y que de lo dicho, nada. Ahí estará la crisis que se agudizará con el partido hermanastro en Cataluña, el PSC, y nadie mejor para capear el temporal que el presidente del PSOE y 'peso fuerte' en el aparato con Zarrías (¡de la que se libran los andaluces!) de escudero. No hay dinero para repartir y nadie como Chaves para quemarse en esa batalla con los catalanes. Ahora, que una remodelación y renovación sea poner a un tipo que lleva 19 años de presidente andaluz, más cuatro de ministro con González, es cuanto menos irónico.
Trinidad Jiménez es una de las 'chicas del presidente', fiel a él desde hace muchos años. Pero ante todo es una gran activista política y, al lado de Aído, pueden ser auténticamente temibles en su actividad sectaria proaborto. Una de ministra de igualdad (a la que le han quitado política social se queda sólo de 'ministra de aborto') y la otra de sanidad, que es la otra pata del banco. Un ministerio que casi no tiene competencias por estar todo transferido, pero que propaganda puede hacer un rato, y para ello nadie mejor que una activista de pro.
En este nombramiento, pese a no coincidir ideológicamente con él, creo que el presidente elige, al menos, a alguien que sabe de la materia de la que deberá de tratar. Se trata de Angel Gabilondo, ex-rector de la Universidad Autónoma de Madrid y hermano del periodista Iñaki Gabilondo y uno de los promotores del 'sindicato de la zeja'. Ya digo que este es muy, pero que muy sectario (al estilo de su hermano), pero al menos es competente en la materia. No sé si es para alegrarse o para asustarse...
La última, pero no por eso más emocionante es Angeles González Sinde, presidenta hasta ayer mismo de la Academia del Cine. Es quizá el nombramiento más sorprendente y a la vez más definitorio. Sutituir a alguien como César Antonio Molina que es un hombre culto, moderado por una persona que si sabe de algo, es de cine, pero cultura es más que cine. ¿Qué sabe González Sinde de museos, teatro, el mundo editorial, las ferias de arte, arquitectura...? Nada, es una pura nulidad, pero eso sí, de nuevo ahora que habrá que recortar, compra Zapatero el silencio de los 'titiriteros'. Es el pago que hace el presidente a aquellos que le auparon a la presidencia hace un año. Ha sido recibida ya con mucha precaución por parte de los internautas que la han bautizado como González SINDEscargas, ya que es una defensora feroz del canón digital. O sea, que si hubiera nombrado a Teddy hubiera estado más aseado, aunque González Sinde cumple la cuota, que siempre es muy estético.
Y la guinda es el ministerio del Deporte que no existe pese a las promesas del presidente, pero que asume él. ¿Y por qué? Pues porque trata de minimizar un posile éxito de Ruiz Gallardón en la candidatura olímpica que haga que se perfile, él y su jefe Rajoy, como dupla presidenciable. De esta manera podrá vender que es él (que no ha hecho sino poner pegas en materia de infraestructuras a Madrid) el que logra la candiatura. Eso y monopolizar, en un momento de crisis, las fotos con Nadal, Contador, y demás deportistas. O sea, pasar del 'sindicato de titiriteros' al de 'deportistas de la zeja'. Un asquito, oiga.
Resumimos. ¿Qué tenemos? Un gobierno pensado para las diversas citas electorales, que buscará la propaganda y el cubrir al 'líder supremo' de cualquier eventualidad dentro y fuera del partido. Se rodea de fieles de la secta progre y de activistas de la agitación. Eso es todo...
Comentarios
El titulo es POR AYUDARNOS A DIFUNDIR LO NUESTRO ¡¡¡ GRACIAS !!! (06/04/09)
Cualquier material que quieran enviarnos tienen, obviamente, las puertas más que abiertas.
Saludos.
Mundy
www.labarcaglogbal.blogspot.com (blog internacional hecho por y para divorciados en nueva unión)