Sexo, mentiras y... cintas de video
El PSOE, para contrarrestar el éxito de las víctimas del terrorismo y evitar que el único -por desgracia- partido que hoy apoya a esas víctimas lo rentabilice, ha sacado un vídeo sobre la actitud del PP durante la tregua del 98. La verdad es que es muy poco lo que se puede reprochar al PP de entonces salvo que durante la primera semana el presidente Aznar se lo creyó (mientras que por ejemplo Mayor Oreja habló desde el primer momento de 'tregua-trampa'), pero fuera de eso, nada.
Vamos a recapitular, ya que han pasado ocho años y es posible que muchos ya no recuerden lo que pasó en España. Y pasó que ETA poco tiempo antes secuestró y asesinó a Miguel Angel Blanco (lo secuestró y dio 48 horas para acercar a todos los presos al País Vasco). La respuesta ciudadana fue maravillosa: la gente de bien se quitó la careta en el País Vasco y acudieron a cercar las sedes de Batasuna y las herrikotabernas (todo el mundo se conoce en estas ciudades pequeñas), la Ertzaina tuvo que proteger a ¡los batasunos!, la gente retiraba los pasamontañas y abarazaba a los amenazdos ertzainas... Fue el momento en el que más miedo se veía en las caras de los asesinos y sus complices: estaban retrocediendo esos hijos de puta, el pueblo vasco estaba encontrando su liberación de tanta barbarie: preferimos morir de pie a vivir de rodillas, gritos de libertad delante de la cara de unos acobardados (siempre han sido unos miserables cobardes) batsaunos. Pero ese día el PNV se alió de nuevo con la ETA para que la indignación en España y el País Vasco se llevara por delante al nacionalismo vasco. Y surgió el pacto de Estella entre todos los nacionalistas que pactaron una tregua-trampa. El Gobierno del PP se la creyó casi al completo menos el que más conocía el paño, el ministro Mayor Oreja. Pero con respecto al alto el fuego actual hay varias diferencias: aquella tregua fue iniciativa de ETA sin que el PP buscase a ETA y en este caso ha habido conversaciones entre PSOE y ETA desde antes de que el partido socialista llegara al poder. En aquel caso, el PP sólo habló de cuándo y dónde iban a dejar las armas y de posibles beneficios penintenciarios. En cuanto ETA vio que no había voluntad de negociar de 'política', rompió la tregua; mientras que aquí tenemos a un gobierno que pese a la clara voluntad de la banda de asesinos de no disolverse, sigue afirmando que 'nadie va torcer la voluntad del gobierno en alcanzar la paz'. ¿Qué paz? ¿La de los cementerios?
Pero es que, además de obsceno, el vídeo tiene varias mentiras flagantes en los datos, con manifestaciones cortadas a propósito (la verdad es que Producciones Rubalcaba es bastante más hábil en la manipulación que Blanco Films), e inexactitudes varias.
Al Gobierno le debe ir muy mal en las encuestas y en la negociación con la ETA para tener que comparar a todos por igual. Pero es que es mentira que ambos gobiernos se comporten igual. El PP informó de cada paso a Almunia, entonces secretario del PSOE, acudió al Parlamento a explicar cada encuentro, y la misma ETA afirmó que las negociaciones terminaron antes de empezar ya que el Gobierno no quiso negociar. ¡Qué diferencias hoy cuando ETA exige que se cumplan los 'acuerdos' y 'compromisos'!
Vamos a recapitular, ya que han pasado ocho años y es posible que muchos ya no recuerden lo que pasó en España. Y pasó que ETA poco tiempo antes secuestró y asesinó a Miguel Angel Blanco (lo secuestró y dio 48 horas para acercar a todos los presos al País Vasco). La respuesta ciudadana fue maravillosa: la gente de bien se quitó la careta en el País Vasco y acudieron a cercar las sedes de Batasuna y las herrikotabernas (todo el mundo se conoce en estas ciudades pequeñas), la Ertzaina tuvo que proteger a ¡los batasunos!, la gente retiraba los pasamontañas y abarazaba a los amenazdos ertzainas... Fue el momento en el que más miedo se veía en las caras de los asesinos y sus complices: estaban retrocediendo esos hijos de puta, el pueblo vasco estaba encontrando su liberación de tanta barbarie: preferimos morir de pie a vivir de rodillas, gritos de libertad delante de la cara de unos acobardados (siempre han sido unos miserables cobardes) batsaunos. Pero ese día el PNV se alió de nuevo con la ETA para que la indignación en España y el País Vasco se llevara por delante al nacionalismo vasco. Y surgió el pacto de Estella entre todos los nacionalistas que pactaron una tregua-trampa. El Gobierno del PP se la creyó casi al completo menos el que más conocía el paño, el ministro Mayor Oreja. Pero con respecto al alto el fuego actual hay varias diferencias: aquella tregua fue iniciativa de ETA sin que el PP buscase a ETA y en este caso ha habido conversaciones entre PSOE y ETA desde antes de que el partido socialista llegara al poder. En aquel caso, el PP sólo habló de cuándo y dónde iban a dejar las armas y de posibles beneficios penintenciarios. En cuanto ETA vio que no había voluntad de negociar de 'política', rompió la tregua; mientras que aquí tenemos a un gobierno que pese a la clara voluntad de la banda de asesinos de no disolverse, sigue afirmando que 'nadie va torcer la voluntad del gobierno en alcanzar la paz'. ¿Qué paz? ¿La de los cementerios?
Pero es que, además de obsceno, el vídeo tiene varias mentiras flagantes en los datos, con manifestaciones cortadas a propósito (la verdad es que Producciones Rubalcaba es bastante más hábil en la manipulación que Blanco Films), e inexactitudes varias.
Al Gobierno le debe ir muy mal en las encuestas y en la negociación con la ETA para tener que comparar a todos por igual. Pero es que es mentira que ambos gobiernos se comporten igual. El PP informó de cada paso a Almunia, entonces secretario del PSOE, acudió al Parlamento a explicar cada encuentro, y la misma ETA afirmó que las negociaciones terminaron antes de empezar ya que el Gobierno no quiso negociar. ¡Qué diferencias hoy cuando ETA exige que se cumplan los 'acuerdos' y 'compromisos'!
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