Mariano, Ciutadans no es Mario Conde, pero Piqué sí es Verstringe

Hoy Mariano Rajoy ha comparado la irrupción de Ciutadans de Cataluña en el escenario de esa comunidad con partidos como 'el de Conde o Gil'. Hombre, don Mariano, le tenemos por un hombre inteligente y podemos pensar que lo de esta semana con el Estatuto Andaluz y lo de hoy debe ser la semana mala del año político, porque sino no se explica. Conde o Gil montaron un partido para sus negocios, y Albert Rivera, Boadella y Espada han formado un partido para denunciar los negocios del 3 por ciento (por cierto, de esto Piqué está mudo, ¿es que espera su parte si CiU le llama?), el Carmelo que se hunde, las lenguas usadas como arma identitaria. Creo que ni Conde ni Gil llegaban a la altura moral e intelectual de este equipo. En lugar de ver como estos chicos han recogido un voto que en circunstancias normales hubiese ido al PP y actuar en consecuencia (¡Alejo, vuelve!), usted les insulta. No creo que sea muy inteligente, teniendo en cuenta que los que somos votantes de su partido nos sentimos a gusto con gente no nacionalista, que defiende la libertad, allí donde esto es más importante que las discusiones 'derecha-izquierda', allí donde la dictadura del nazionalismo se ha hecho más presente: País Vasco, Cataluña y dentro de poco su tierra gallega.

Luego dice usted que 'debemos seguir profundizando para saber qué ha ocurrido y tomar medidas en el futuro' para intentar recuperar votos y escaños. Aunque usted ya lo sabe -tonto no es, es gallego, que es muy distinto, y ejerce de tal-, le puedo dar algunas ideas:

1. Parar, como dijo Mayor Oreja, los procesos de reforma autonómica. No participar en esos 'enjuagues', que solo benefician al PSOE.

2. Apostar por un Estado fuerte que 'blinde' sus competencias ante las 'veleidades' nacionalistas.

3. Apostar por una reforma de la Ley electoral que incluya o bien el sistema mayoritario o bien el doble 5% (5% en la circunscripción y al menos un 5% nacional). El peso actual de los nacionalistas es mucho mayor de lo que realmente representan.

4. Tener el mismo discurso en el País Vasco y en Cataluña, y en Baleares, y en mi querida Comunidad Valenciana (¿qué es eso de la cláusula Camps? Somos más españoles que nadie y noq ueremos para nada lo mismo que los catalanes, queremos lo mismo que el resto de los españoles, sin privilegios). Para eso, necesita usted actuar al modo Aznar (¿lo recuerda? Usted estaba allí): librarse de los Herreros de Miñon, Verstringes y demás gente, que ahora son los Piqués, Gallardones, Arriolitas y Elorriagas centristas y sus 'lluvias finas'. Don Mariano, ¡está cayendo el diluvio sobre España, y usted con un paragüas!

Volver a un discurso firme, parar a los 'barones', apostar por España y dejarse de 'poderes periféricos': lo importante es España, porque si no defiende España, ¿para qué queremos al PP?