Gobierno de España: posibilidades y tercera vía

España está ante uno de los momentos más importantes de su reciente Historia. Es lo que se llama 'una encrucijada'. Ahora debe elegir qué camino seguir: el de las democracias avanzadas del centro y norte de Europa (Alemania, Austria e incluso Francia) o bien deslizarse hacia donde ya cayeron (aunque ahora estén saliendo) países como Venezuela o, efímeramente, Grecia. El resultado de las elecciones del pasado 20 de diciembre han dado a la luz un Parlamento endemoniado. Cualquier mayoría es prácticamente imposible, salvo que los políticos españoles pasen antes por un máster en acuerdos en Alemania, porque si siguen enrocados en su negativa a apoyarse, lo más normal es que en abril o mayo tengamos una especie de segunda vuelta.
La configuración del Parlamento ha dejado una especie de dos bloques claramente diferenciados:
- Centro-derecha: con PP y C's. Llegaría hasta un centro izquierda un 'poquito' a la derecha del PSOE.
- Izquierda: fundamentalmente dos actores que son el PSOE y Podemos (no olvidemos los dos diputados de IU). Esto abarcaría desde el centro izquierda a la extrema izquierda de los podemitas.
- 'Macedonia' de partidos independentistas, nacionalistas, regionalistas y demás istas. Estos son fundamentalmente de izquierdas, aunque ni a PNV ni, en principio, a CDC podemos encuadrarlos ahí.
El problema es que mientras uno de los dos bloques no favorezca la investidura de un candidato de uno de los otros bloques, bien sea apoyando, bien sea con la abstención, la situación es de bloqueo. Porque la suma entre PP y C's es de 163 (123+40) mientras que la de PSOE+Podemos es de 159 (90+69). Haría falta a la izquierda sumar a los partidos de corte independentista para lograr ese apoyo, pero en principio, el PSOE descarta hacerlo siempre que no renuncien a su propósito (compartido por Podemos) de celebrar un referéndum para la independencia de sus territorios. La opción del PSOE con C's que también se barajaba es aún más inestable ya que no puede sumar a los de la 'macedonia' y contaría con el rechazo (por diferentes razones) de PP y Podemos.
Visto así, salvo que queramos dar por cerrada la décimo primera legislatura como la más corta de la Historia de España, la solución pasa por ceder en la investidura. ¿Cuáles son las posibilidades? Analicemos por orden...
- Mariano Rajoy como candidato con el apoyo de PP+C's y la abstención de todo o parte del PSOE. Esto permitiría que el segunda votación Mariano Rajoy fuera investido presidente. Esto choca con las declaración de C's (matizadas después es cierto) y de PSOE de no permitir que Mariano Rajoy sea presidente.
- Pedro Sánchez como candidato con el apoyo de Podemos y la abstención de PP (la de C's no sería necesaria). Que el PP favorezca un gobierno de extrema izquierda creo que forma parte de la 'política ficción'. Que lo haga C's, creo que también.
- Pedro Sánchez de candidato con el apoyo de Podemos más ERC más otros partidos que al menos por omisión lo permitan. Lo primero que tendría que lograr Pedro Sánchez es que le dejen en su partido y/o que partidos como ERC renuncien a la independencia (además de las marcas blancas de Podemos que quieren lo mismo como Compromís, En Comú o En Marea). No es un acuerdo fácil.
- Un candidato de consenso del PP con el apoyo de C's y la abstención de todo o parte del PSOE... sin Sánchez (o incluso el apoyo-entrada en el gobierno del PSOE). Esta es la solución que sólo se planteará cuando las anteriores fracasen. Porque si hay un problema aquí son los personalismos y la malísima relación que mantienen Rajoy y Sánchez.
Esta última solución es la que quizá más convendría a España y que más se ajusta -digan lo que digan los dos 'muertos vivientes'- a lo salido de las urnas. El PSOE de Sánchez no puede pretender gobernar con el peor resultado del PSOE desde la vuelta a la democracia. Y el PP de Mariano Rajoy ha visto manifestado el rechazo a su política con una caída de ¡43 escaños! aunque sigue siendo el partido más votado. Desde luego tienen que pactar, pero ambos partidos deben renovar su mensaje y sus líderes si quieren seguir siendo importantes en el futuro.
Ahora bien, ¿quién le dice a Sánchez y a Rajoy que "están muertos" políticamente hablando? ¿Y quién puede ser esa persona de consenso que haga que los tres partidos dispuestos a mantener el sistema democrático que nos dimos en 1978 la apoyen? Desde luego sólo hay dos opciones viables: o elecciones o gobierno de consenso.
¿Y qué es mejor para España? Pues aunque me pese coincidir con Rajoy, la mejor opción sería ese gobierno de 'concentración' al modo alemán que haga una legislatura corta (2 años), con un programa de pocas cosas y con las reformas que permitan alejar el independentismo, la corrupción y afiancen la recuperación económica y den seguridad a las inversiones extranjeras. Ahora bien, ese gobierno sólo es posible sin Rajoy... y sin Sánchez. ¿Podrán? E
l tiempo lo dirá