Las 'ideas' encima de la mesa de Pepiño
Estos fines de semana de la canícula veraniega los ocupan nuestros políticos en dos menesteres: o bien departen en cursos de verano conferencias que no son sino discursos mitineros sin gritos o bien celebran congresos que no son sino discursos mitineros con los gritos de costumbre y donde los que acuden a votar lo hacen a la lista única (¡esto es democracia! y aquí no se salva ni uno). Pues bien, tras el fin de semana pasado en el que José Luis Rodríguez Zapatero nos anunció los tres ejes sobre los que basaría su nuevo mandato (no penséis que se trata de economía, terrorismo y política exterior, eso son cosas de la 'derecha facha'): aborto, eutanasia y laicismo; pues tras ese fin de semana, el PP había criticado que el Gobierno se dedicase a estas cosas en lugar de preocuparse por una inflación que alcanza ya cotas desconocidas desde 1995 (¿quién era entonces el minsitro de economía? ¡Exacto! Pedro Solbes, esto se llama ser fiel a unos principios... los del desastre, pero principios), un paro que alcanzará según los expertos internacionales los tres millones al final de año, un Euribor que aunque no dependa de él está haciendo que las familias españolas no puedan pagar las hipotecas, etc. Vamos, lo normal, ocuparse de la gestión de los asuntos de la res publica en lugar de pretender hacer ingeniería social. Aunque algunso ya sabemos desde hace años (antes incluso de que llegase al poder) de que las intenciones de ZP eran cambiar la sociedad para construirla a su antojo: ahí están el gaymonio, el divorcio-express y, sobre todo, la Educación para la tiranía que nos ha traído el visionario leonés.
Pues bien, en uno de esos congresos, el número dos del PSOE, José (¿o ahora es Xose?), Pepinho, Blanco ha criticado la actitud del PP cuando 'se ponen debates de ideas encima de la mesa'. Resultaría cómico si no fuera porque hablamos de la 'cultura de la muerte' que desde los años 60 del siglo pasado viene imponiendo su agenda de la mano de un feminismo radical que no ha comprendido nunca la grandeza de la mujer como diferente al varón y cuyo respeto por la vida es nulo. El PSOE no ha puesto ideas encima de la mesa, por seguir la jerga de Blanco, sino cadáveres. Los cadáveres de niños sacados del vientre de su madre con violencia, los cadáveres quemados con solución salina, los cadáveres de ancianos y enfermos de Leganés sedados por el Dr. Montes y su 'mala praxis médica' (según informe del colegio de médicos). Esas son la ideas que hoy nos trae el PSOE a nuestra consideración: ahondar en la muerte, convertir al hombre en Dios, en señor de la vida y de la muerte.
Esto es el 'progreso' socialista: matar a los enfermos y ancianos y asesinar a los niños en el vientre de su madre...
Esto es lo que nos espera en la legislatura que acaba de comenzar: estábamos calentando motores, pero el otoño será intenso... ¿Despertará el PP?
Pues bien, en uno de esos congresos, el número dos del PSOE, José (¿o ahora es Xose?), Pepinho, Blanco ha criticado la actitud del PP cuando 'se ponen debates de ideas encima de la mesa'. Resultaría cómico si no fuera porque hablamos de la 'cultura de la muerte' que desde los años 60 del siglo pasado viene imponiendo su agenda de la mano de un feminismo radical que no ha comprendido nunca la grandeza de la mujer como diferente al varón y cuyo respeto por la vida es nulo. El PSOE no ha puesto ideas encima de la mesa, por seguir la jerga de Blanco, sino cadáveres. Los cadáveres de niños sacados del vientre de su madre con violencia, los cadáveres quemados con solución salina, los cadáveres de ancianos y enfermos de Leganés sedados por el Dr. Montes y su 'mala praxis médica' (según informe del colegio de médicos). Esas son la ideas que hoy nos trae el PSOE a nuestra consideración: ahondar en la muerte, convertir al hombre en Dios, en señor de la vida y de la muerte.
Esto es el 'progreso' socialista: matar a los enfermos y ancianos y asesinar a los niños en el vientre de su madre...
Esto es lo que nos espera en la legislatura que acaba de comenzar: estábamos calentando motores, pero el otoño será intenso... ¿Despertará el PP?
Comentarios
Creo que el PP sabe a ciencia cierta que sólo puede ganar elecciones si hay abstención masiva. Para ello la izquierda radical tiene que renegar del PSOE, lo cual sucede cuando hay crispación, o bien cuando la situación es ya terriblemente insostenible.
Por esa línea, que no me gusta nada, va el PP. Quiere gobernar en un futuro... y parece que para ello está dispuesto a hipotecar el presente.
Te pido que visites, cuando tengas un momento, el post que he escrito sobre el diario Metro, examines la imagen y me des tu opinión.
Un abrazo.