Gallardón no irá al Parlamento
Finalmente Mariano Rajoy ha dado una muestra de autoridad y ha segado bajo sus pies a aquellos que desde dentro del partido (y desde la izquierda mediática) querían ponerle al Alcalde de Madrid como sustituto ante una derrota o como presidente ante una victoria no suficiente. Como en el 96 cuando El País quiso poner a Gallardón como presidente por encima de Aznar, hoy muchos proponían a Gallardón como sucesor de Rajoy. Y Mariano, muy a la suya, a la gallega, ha movido ficha y se ha deshecho de esa ambición con patas que es Gallardón.
Ahora intentan, como llevan haciendo años, que la mala sea Esperanza Aguirre y que Gallardón pase por la víctima de esta 'derechona' de la que Gallardón huye. Porque Gallardón es 'de centro', que quiere decir que no tiene principios o que es marxista al Groucho modo: 'estos son mis principios, si no le gustan, tengo otros'. Un tipo que es 'políticamente correcto' en todo, que cae mejor a los teóricamente adversarios que a los partidarios, que sólo busca su beneficio y no el del partido.
Ya ha comenzado su particular justificación donde será acompañado por el ABC (¿quién te ha visto y quién te ve?) y por supuesto por todos aquellos que quieren que gane ZP (¡qué curioso, verdad!). Ejemplos, hoy mismo, tras conocerse, se ha dicho esto:
"no incluir a Gallardón que declara ser una persona de derecha moderada demuestra que es la derecha más conservadora, más rancia, la que prima en las listas, es decir, los amigos del Señor Aznar, como el señor Pizarro" (Jesús Caldera)
[El PP] "está haciendo el viaje al centro que iba a hacer, lo está haciendo pero al centro de la Tierra" (Elena Salgado)
"la extrema derecha no sólo gobierna el PP del presente, sino que prepara el Gobierno del PP del futuro" (Gaspar Llamazares)
"El aznarismo decide. Por la mañana incluye a Pizarro, su hombre de negocios. Por la tarde excluye a Gallardón, el moderado" (José Pepinho, Blanco)
Esto debería hacer pensar, si no estuviera más preocupado de su propia megalomanía que del partido al que dice representar, a Gallardón sobre su forma de afrontar el asunto.
En fin, Mariano suelta lastre antes de las difíciles jornadas que se avecinan. Lo comentaremos.
Ahora intentan, como llevan haciendo años, que la mala sea Esperanza Aguirre y que Gallardón pase por la víctima de esta 'derechona' de la que Gallardón huye. Porque Gallardón es 'de centro', que quiere decir que no tiene principios o que es marxista al Groucho modo: 'estos son mis principios, si no le gustan, tengo otros'. Un tipo que es 'políticamente correcto' en todo, que cae mejor a los teóricamente adversarios que a los partidarios, que sólo busca su beneficio y no el del partido.
Ya ha comenzado su particular justificación donde será acompañado por el ABC (¿quién te ha visto y quién te ve?) y por supuesto por todos aquellos que quieren que gane ZP (¡qué curioso, verdad!). Ejemplos, hoy mismo, tras conocerse, se ha dicho esto:
"no incluir a Gallardón que declara ser una persona de derecha moderada demuestra que es la derecha más conservadora, más rancia, la que prima en las listas, es decir, los amigos del Señor Aznar, como el señor Pizarro" (Jesús Caldera)
[El PP] "está haciendo el viaje al centro que iba a hacer, lo está haciendo pero al centro de la Tierra" (Elena Salgado)
"la extrema derecha no sólo gobierna el PP del presente, sino que prepara el Gobierno del PP del futuro" (Gaspar Llamazares)
"El aznarismo decide. Por la mañana incluye a Pizarro, su hombre de negocios. Por la tarde excluye a Gallardón, el moderado" (José Pepinho, Blanco)
Esto debería hacer pensar, si no estuviera más preocupado de su propia megalomanía que del partido al que dice representar, a Gallardón sobre su forma de afrontar el asunto.
En fin, Mariano suelta lastre antes de las difíciles jornadas que se avecinan. Lo comentaremos.
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