"¿Qué problema hay con que un ciudadano sea vasco navarro?"
Simplemente copio de El Semanal Digital (artículo de Miguel Angel Orellana). Muy grave, como casi todo con este 'iluminado':
"Pero, ¿tú tienes algún problema por decir que eres un ciudadano de Castilla y León?". La pregunta, hecha desde una cierta confianza, la planteaba el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a un conocido empresario castellano leonés, en un cara a cara en el Palacio de La Moncloa. La respuesta del desconcertado interlocutor fue concisa e inequívoca: "Desde luego que no, presidente". "Entonces –prosiguió el jefe del Ejecutivo-, ¿qué problema puede haber con que uno diga que es a la vez ciudadano del País Vasco y de Navarra?".
La formación de Euskal Herria es la máxima aspiración de ETA, el verdadero tablero de la negociación con Zapatero. Lo es porque las otras aspiraciones de la banda terrorista –legalización de Batasuna y presos– los etarras las dan ya por hechas. Y últimos elementos de este tristísimo cuadro son la inminente presentación de los batasunos a las elecciones municipales y forales del mes de mayo y la excarcelación del sanguinario José Ignacio de Juana Chaos.
"¿Qué problema puede haber con que uno diga que es vasco navarro?". Saltó la liebre. Zapatero parece dispuesto, a medio o largo plazo, a violentar la Disposición Transitoria Cuarta de la Constitución Española para que una mayoría en el Órgano Foral navarro conformada por el Partido Socialista y la "izquierda abertzale" y radical convoque un referéndum en todo el territorio de lo que la banda asesina llama Euskal Herria. Y si los navarros no se oponen, será así porque a quien redactó la disposición no delimitó el ámbito geográfico del referéndum posterior a la decisión de la anexión.
O sea, que los navarros no podrán decidir y que como 'la nación es un concepto discutido y discutble', pues esto también.
"Pero, ¿tú tienes algún problema por decir que eres un ciudadano de Castilla y León?". La pregunta, hecha desde una cierta confianza, la planteaba el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a un conocido empresario castellano leonés, en un cara a cara en el Palacio de La Moncloa. La respuesta del desconcertado interlocutor fue concisa e inequívoca: "Desde luego que no, presidente". "Entonces –prosiguió el jefe del Ejecutivo-, ¿qué problema puede haber con que uno diga que es a la vez ciudadano del País Vasco y de Navarra?".
La formación de Euskal Herria es la máxima aspiración de ETA, el verdadero tablero de la negociación con Zapatero. Lo es porque las otras aspiraciones de la banda terrorista –legalización de Batasuna y presos– los etarras las dan ya por hechas. Y últimos elementos de este tristísimo cuadro son la inminente presentación de los batasunos a las elecciones municipales y forales del mes de mayo y la excarcelación del sanguinario José Ignacio de Juana Chaos.
"¿Qué problema puede haber con que uno diga que es vasco navarro?". Saltó la liebre. Zapatero parece dispuesto, a medio o largo plazo, a violentar la Disposición Transitoria Cuarta de la Constitución Española para que una mayoría en el Órgano Foral navarro conformada por el Partido Socialista y la "izquierda abertzale" y radical convoque un referéndum en todo el territorio de lo que la banda asesina llama Euskal Herria. Y si los navarros no se oponen, será así porque a quien redactó la disposición no delimitó el ámbito geográfico del referéndum posterior a la decisión de la anexión.
O sea, que los navarros no podrán decidir y que como 'la nación es un concepto discutido y discutble', pues esto también.
Comentarios
El problema es que es del tipo de los que disfrutan con los suicidios colectivos.