Cruela Devil y sus amenazas a los católicos


Les ha sentado mal la clase de Ciudadanía que dimos el sábado en Madrid. Que casi dos millones de personas, la mayor manifestación de la historia de la democracia, le digan al Gobierno que retire un bodrio como la LOE, debe ser duro. Y más cuando te vanaglorias de que tú ibas a dialogar con todos, no como el antipático de Aznar que no escuchaba a la calle. Hasta ahora vamos bien, escuchando a la calle: casi ochocientas mil personas contra el dialogo con ETA. Resultado: seguimos dialogando con ETA, mendigando una tregua. Un millón de personas a favor del matrimonio entre hombre y mujer y el derecho de los niños a tener padre y madre. Resultado: la ley del pseudomatrimonio homosexual siguió para adelante sin recibir a los manifestantes. Casi dos millones contra la LOE y a favor de la libertad de educación. Resultado: Pepiño Blanco, el corruto, insulta a los obispos llamándoles mentirosos, De la Vogue, esa cruela Devil venida a menos, amenaza a los obispos con retirar la ayuda ¿del Estado? a la Iglesia.

Pues nada señora vicepresidenta, adelante con los faroles. Como los Obispos no se atreverán, gente de orden ellos, tendremos los demás que movernos. Solución: descontamos de nuestros impuestos que pagamos al Estado la ayuda a destinar a la Iglesia mediante escrito formal a la Agencia Tributaria y nos hacemos Objetores Fiscales. Hay que descontar lo dedicado a sufragar a las diversas ong's progresistas que defienden el aborto, la esterilización en países pobres; los sueldos de los tiempos dedicados a perder el tiempo por parte de los funcionarios de Justicia para casar a los zerolos (enhorabuena vicepresidente, me dicen que se casa por fin con su pareja de toda la cida. Felicidades a las dos). De esta manera, los pobres seguirán teniendo a la Iglesia a su lado cuando nadie quiera estarlo. Y así mis impuestos irán donde yo decida y no el Estado que se los dará sus amigos de Amnistía Internacional. Creo que es una buena solución

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